✍🏻 Carlos Sarmiento [ @apanado ]
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Las canciones de Jorge Velosa no se escriben únicamente con tinta o con los cuatro palitos: se fraguan con memoria, se abonan con amor por el campo y florecen con la palabra viva del campesino. Así lo demuestra “Soy Hijo de Campesinos”, el nuevo sencillo de su más reciente producción musical, un merengue carranguero que brota como declaración de origen, resistencia y profundo orgullo rural. Esta obra, como las otras trece que están por venir en el disco total, cuenta con la participación de Marco Villarreal en la producción, el requinto y la segunda voz; Gabriel Chaparro en la guitarra, y Angélica Fonseca en el tiple. En su letra, Velosa canta la vida entre cerros, animales, labranzas y escuela; canta el rancho, la espiga, la copla y la tonada. Pero también denuncia, con su pluma aguda, la marginación de quienes han hecho del campo su vida y de la tierra su esperanza. “Los tienen como los tienen, inmisericordemente”, sentencia el verso. “Soy hijo de campesinos” se inscribe en la veta más íntima del repertorio carranguero. Es pariente cercano de “El rey pobre”, “Buenos días, campesino” y “Canto a mi vereda”, piezas donde el maestro deja ver el alma campesina que camina por sus versos. Más que una canción, “Soy hijo de campesinos” es una declaración carranguera. Una forma de decir, sin gritar, que el campo sigue vivo en quienes lo viven, lo recuerdan, lo nombran y lo defienden con el arte. ¡Que vivan los campesinos y que los dejen vivir!, que el campo sin campesinos existe sin existir.
